Morales exigió a comunidad internacional no proteger a corruptos bolivianos

Evo Morales: "si nosotros aplicamos esta ley, seguramente nadie va a querer ser político, porque ya no se roba".
El jefe de Estado de Bolivia, Evo Morales, exigió este miércoles, durante la promulgación de la nueva ley anticorrupción, a los países y organismos internacionales que no abriguen a los bolivianos acusados de corrupción.
Durante su discurso, en la ciudad de La Paz, el presidente Morales defendió el nuevo decreto y lo consideró histórico para su país, en donde cada año se pierden entre 200 y 300 millones de dólares por corrupción.
"Algunos organismos internacionales estaban un poco cuestionando el tema de la retroactividad de la ley. No pues (no es posible), para gente que roba, cómo no pues, no puede ser (la ley) sin retroactividad; la retroactividad está constitucionalizada", advirtió el gobernante.

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A dos meses de asumir el mandato el gobernante puso en vigencia la norma que fue congelada por la oposición parlamentaria entre 2007 y 2009.
Este miércoles entró en vigor la Ley de Lucha contra la Corrupción, Enriquecimiento Ilícito e Investigación de Fortunas, aprobada por la Asamblea Legislativa Plurinacional, y se aplicará apenas salga publicada en la Gaceta Oficial de Bolivia.
"Es la única forma de recuperar, además, los bienes estatales. Por eso vamos a esperar a la comunidad internacional, para abordar sus cuestionamientos sobre la Ley de Lucha contra la Corrupción, Enriquecimiento Ilícito e Investigación de Fortunas", especialmente reservada para los servidores públicos, afirmó Morales.
El presidente extendió una felicitación a los presidentes de la Cámara de Diputados, Héctor Arce y René Martínez, además de los senadores del Parlamento.
Esta ley ha sido rechazada en el sector de la oposición boliviana, porque según afirman, temen ser objeto de persecución política. Ante esta matriz de opinión, el Presidente señaló que no hay por qué temer a la ley, ni escapar, ni buscar protección de organismos internacionales.
"Países vecinos, presidentes o Gobiernos de los países del mundo u organismos internacionales no pueden defender a ningún corrupto", insistió el jefe de Estado, porque este decreto "sería el mejor aporte para erradicar la corrupción. No es posible que alguna gente se escape al exterior", insistió Morales.
El caracter de retroactividad de la ley, permite investigar a las personas que incurrieron en corrupción en gobierno anteriores. En este sentido, el mandatario advirtió que la Cancillería y la Justicia nacional tendrán una batalla legal para que sancionen a quienes salieron del país, porque "llegó la hora de sentar la mano (de castigar) a la gente que ha hecho tanto daño a los bolivianos".
Ley de Lucha contra la Corrupción, Enriquecimiento Ilícito e Investigación de Fortunas, es la primera en la historia jurídica y legislativa de Bolivia, que hace 11 años se inscribió como la segunda nación en el mundo con mayores índices de corrupción pública.
Esta norma, fue antecedida por la huida a Chile y Perú de Guillermo Fortún, ministro de Gobierno del ex presidente conservador y dictador militar Hugo Banzer, requerido por un fiscal para esclarecer el destino que, como autoridad, entre 1997 y 2001, dio a la partida de gastos reservados de entre 20 y 30 millones de dólares año.
Morales señaló que la corrupción es el peor enemigo de Bolivia, aunado a las políticas de exclusión y el saqueo de recursos naturales de su país. Recalcó que no basta con aplicar la ley anticorrupción, sino se debe cambiar "de mentalidad", sobre todo por parte de los servidores públicos del país.
Por su parte, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, consideró que la nueva ley defiende a la patria y encarcela a cualquier funcionario que se atreva a tocar un solo centavo del Estado.
"La base material de la patria son sus recursos que unen a las personas de la patria, que nos hace partícipes de un destino y de una riqueza compartida, esa base material son los recursos naturales con los que cuenta la patria y son los recursos económicos que dispone el Estado, el país, como resumen de la comunidad política", explicó Linera.
García Linera felicitó también a los asambleístas que revirtieron, en poco más de un mes, los 45 meses que la ley "enterrada en las gavetas del Senado", después que fue aprobada en la Cámara de Diputados el 13 de julio de 2006.
"Y desde esa fecha, esa ley de protección de la patria, de lucha contra la corrupción, de resguardo de los recursos comunes de los bolivianos, de sanción y castigo del funcionario corrupto, esa ley quedó encerrada en las gavetas del anterior Congreso, en manos de una oposición que controlaba el Senado", remarcó.
Por último, Morales manifestó que "si nosotros aplicamos esta ley, seguramente nadie va a querer ser político, porque ya no se roba, por tanto ya no se gana (a manos llenas). Ese es el futuro de los políticos en Bolivia", servir al pueblo y servirse de él, señaló el mandatario quien dijo estar dispuesto a dar la batalla, "en persona", a la corrupción.
El acto se realizó en el salón principal de la casona de gobierno, en La Paz, en donde asistió el Ejecutivo en pleno.

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